lunes, 18 de junio de 2012

Fundición Inka Diaguita, Viña del Cerro, Atacama, Chile


Desde hace algunas semanas, he estado visitando un sitio arqueológico que considero fascinante. Me refiero a la fundición Inka-Diaguita de Viña del cerro, a unos pocos kilómetros de Los Loros, al interior del Valle de Copiapó.

Fui muchos años atrás en un grupo de visita conducido por Eduardo Aramburu, junto a mi amigo Poeta Cristian Muñoz. Recuerdo bien que repare en que los muros de barro (reconstrucción de los años 80), tenían algunos fragmentos de cerámica, lo que me impresiono bastante, pues lo interprete como un error por parte de los que hicieron las reparaciones.

En esa oportunidad, me impresiono todo el sentido lógico que tenía el recinto, pues como soy Ingeniero Civil en Metalurgia, sé muy bien que es una Planta de beneficio de minerales y yo estaba viendo una, solo que esta tenía casi 500 años!

Mientras recorría el lugar visualice la imagen de varios diaguitas llevando mineral molido en llamas, vicuñas o alpacas y descargando este material allí, en una cancha interior que está en el recinto mas grande, el guía nos señalo que se trataba de una fundición y nos enseño unos pircados circulares que identifico como hornos que estaban varios metros más alejados en un sector con mucho viento.

También se nos mostro lo que correspondería a una habitación para el jefe de la planta (fundición), todo me hacia sentido… excepto una cosa… que era lo que procesaban y como lo hacían?

La respuesta la vine a escuchar un par de años mas tarde en un congreso de metalurgia (Conamet), en la CCHEN (Comisión Chilena de Energía Nuclear, La Reina, Santiago), en una charla dictada por el Profesor David Fuller Brain, quien explico cómo funcionaban estos hornos.

Me quedo claro que se trataba de una especie de horno del tipo  flujo pistón, el que consistiría en un  cono truncado de una altura considerable (1 o 2 mts) y que dispondría de un receptáculo de cerámica, para el metal fundido, complementada además, con una entrada tubular bajo el horno, también hecha de barro y piedras, orientada en el sentido del viento

El horno se alimentaba con óxidos de cobre molido (quizás cuprita, crisocola o chalcantita), utilizando como fuente de energía carbón de leña (quizás se trataba de Yaretas, por su alto poder calorífico).

El diseño era bastante simple, se cargaban camadas de leña y carbón sobre un lecho de rocas, sobre un deposito cerámico situado en la parte más baja del interior del horno, sobre las que se dejaba caer el mineral molido, para luego encenderlo y dejar que por una abertura entrara el fuerte viento que circula por ese sector, iniciando el proceso de fusión.

En realidad eso es lo que alcanzo a recordar, probablemente varios detalles más los he olvidado, sin embargo hasta ahora no me queda claro que solo procesaran cobre en este lugar.

En estas últimas visitas, he podido fotografiar el lugar, el que se encuentra bastante bien conservado pese al deterioro propio de este tipo de materiales y al habitual paso de “necios con pretensiones de pasar a la posteridad” que han dejado sus brutales y típicos garabatos en los muros con fechas de visita y datos del futbol nacional, como si a falta de un libro solo les quedara marcar como única alternativa…

Una cosa me ha dado vueltas en el último tiempo y tiene que ver con el hecho de que los inkas tenían al igual que varias culturas ancestrales, un fijación constante con la astronomía y personalmente no había encontrado información sobre esto, para este sitio, salvo mis propias ideas, en la que bajo mi parecer, el croquis de la fundición se parece bastante a la constelación de Orión (Las tres marías, para el que no la ubica).

Me explico, si uno ve la foto satelital de Google Earth, podrá al menos tres cosas, estas son:

El recinto administrativo, que correspondería a la estrella Betelgeuse, los tres sectores (con dos habitaciones cada uno) que se encuentran hacia el noroeste de la construcción principal, las que corresponderían al cinturón de Orión y finalmente, el Altar (Ushnu), que se encuentra en el interior del recinto principal, la que tendría su correspondencia con la nebulosa de Orión (M42).

Claro está que dicha imagen, estaría invertida, según mi impresión, como si alguien estuviera debajo de este lugar observando el cielo.

Quedo con la impresión, que quizás la orientación de las huayras (los hornos), tendrían la misma dirección que tienen las tres estrellas del cinturón, hacia la estrella Sirio, es mas da la impresión de que hay algo allí, pero hasta donde recuerdo, solo un hay un espacio limpio.

Me había quedado con la impresión que no había nada y que esta imagen mía era solo producto de mi ansiedad por ver cosas donde no las hay.

Hasta que hace unos días di con un estudio fabuloso realizado por el Arqueólogo chileno, Ricardo Moyano Vasconcellos, quien el año 2010 publico su estudio “EL USHNU Y LA ASTRONOMÍA DE HORIZONTE EN VIÑA DEL CERRO” (Volumen 42, Nº 2, 2010. Páginas 419-432), la que guardando las proporciones con mi entusiasta y desinformada teoría, explica y detalla científicamente los aspectos astronómicos de la construcción.

Resumidamente, se trata de un estudio científico que da cuenta de algunos hechos astronómicos, tales como la orientación del recinto hacia los solsticios y algunas efemérides lunares, que serian parte de los rituales que probablemente se realizaron en el altar del recinto, además de la ubicación de un gnomon, que habría servido como indicador de las horas del día.

Que mas decir, hay bastante información arqueológica, sobre estos recintos en Chile, disponible en internet, los dejo con la inquietud para buscarla y disfrutar.

No me puedo quitar de la retina, esa imagen de mis tiempos de estudiante en la Universidad de Atacama, cuando visite este bello lugar, la imagen de una planta metalúrgica, con sus respectivos procesos de clasificación de minerales, molienda, fundición y despacho de metales para el Inka.

Una gran y potente imagen!
Eso.






















4 comentarios:

  1. Estimado. Me alegro mucho que personas no necesariamente ligadas directamente al tema arqueológico e histórico se interesen en estos temas. Yo soy uno de ellos, Un casi arquitecto que trabaja en un humilde proyecto y que me gustaría utilizar sus fotos para incluirlas en mi memoria de proyecto. Saludos y gracias!

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  2. Bueno, he visto tus comentarios recién 6 años después que lo subiste. Fascinante la historia de este lugar y también lo del ushnu, a lo cual llegué por otro camino. Estoy por ir al lugar hace años y no he podido. Al igual que tú y Patricio, no soy del área arqueológica pero me ha ido interesando cada vez más la cultura diaguita. Saludos

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